Barbacoas de Pellet

Una barbacoa de pellet es una barbacoa que puede cocinar a la parrilla y también al horno, ahumar y mucho más, utilizando pellets de serrín o madera comprimidos como combustible, lanzándolos normalmente en el área de combustión. Están sobre todo diseñadas para cocinar a través de ahumado, a baja temperatura.

El ahumado es un método de cocción por convección que se realiza en un entorno cerrado, acumulando el calor y el humo. Las carnes se cocinan en un ahumador con aire caliente a baja temperatura en presencia de humo de leña o pellets. Se trata de hornear la carne a baja temperatura. Los pellets le dan un sabor especial según de que árboles procedan.

Por supuesto, y es muy sencillo, muchas barbacoas de gas vienen preparadas para ello y lo hacen de forma automática. De una manera u otra se trata de introducir madera o pellets en la zona de combustión, manteniendo siempre una temperatura baja y el espacio de cocción cerrado.

Se trata de pequeñas piezas de madera o serrín comprimidas, preparadas para usar en alimentación. Dan sabores especiales al asado según el tipo de madera del que están fabricadas.

En los casos en que no usemos pellets preparados para uso en alimentación en nuestra barbacoa, podemos encender la madera a máxima temperatura. Se crea una capa de humo que cubre el interior del ahumador neutralizando los químicos y olores que pueda tener. Pasadas 3 horas ya podemos usar el ahumador para cocinar.

Normalmente las barbacoas de pellets, o cualquier otra diseñada para ahumar, cuenta con un control de la temperatura. La temperatura de ahumado suele estar entre 70 y 120 grados centígrados, que varía, así como el tiempo de cocción, en función del peso y características de la carne que queramos cocinar.

Las costillas de cerdo pueden ser una de las mejores carnes para ahumar, además de muy sencillas de cocinar. Son casi imposibles de cocinar en exceso y casi siempre permanecen tiernas cerca del hueso.